Siempre me han dicho que hago una tortilla bastante buena, pero últimamente ha pasado algo que podría decir que es... extraño..., mi chico es un cocinero con buenas intenciones, pero con poco ojo (por decirlo de alguna forma), y desde que vi que su madre (francesa) tiene en su nevera tortilla de patata de esa empaquetada de supermercado, me he propuesto enseñar a mi chico a hacer la tortilla de patata para que él algún día pueda enseñar a su madre.
Y no os creáis, que enseñar a este chico no es tarea sencilla!!, cada vez que le digo que me haga una tortilla, me vuelve a preguntar "¿cuántas patatas?", "¿cuánto tiempo?" "¿cómo las corto?"... deseseperante..., ¡si es lógico!!!. Siempre pregunta, pero no sé qué tiene en las manos, ¡que le sale una tortilla muchísimo más rica que la mía!.
Así que para esta receta, le he pedido su buen punto de mano para que me ayude :)
Ingredientes:
- 3 patatas medianas
- 3 huevos
- 4 cucharadas de pimientos del piquillo en tiras
- aceite de oliva
Preparación:
Pelar y lavar las patatas, y cortarlas en láminas intentando que sean todas homogéneas, salarlas al gusto, o ante la duda, siempre poquita sal.
Poner un dedo de aceite de oliva en una sartén y calentar a fuego medio-alto. Un truco que me contaron es que el aceite hay que ir calentándolo poco a poco, por alguna razón, si se calienta paulatinamente cuando se añaden los ingredientes a freír, éste no se enfría con el golpe de frío de los alimentos y no baja de repente su temperatura, cuestión que sí que pasa si de primeras lo pones a temperatura muy alta para que se caliente rápido y de un golpe.
Se añaden las patatas, se mueven y se bañan bien en el aceite, se baja el fuego y se tapan, los primeros 5 minutos a fuego medio y después a fuego bajo, hay que pensar que las patatas se tienen que hacer, pero no dorar ni ponerse crujientes.
Tardan en hacerse unos 20 minutos.
Mientras, batir los huevos, cuando las patatas estén hechas, escurrir y añadirlas. Añadir los pimientos del piquillo y remover.
A nosotros nos gusta que la tortilla esté crudita, así que, en la misma sartén en la que freímos las patatas, quitar prácticamente todo el aceite y poner el fuego medio-alto, cuando esté bien caliente la sartén, añadir la mezcla, esperar hasta que esté dorada por abajo (se levanta un poquito por un lateral con un tenedor), como el fuego está fuerte, no tarda mucho, dar la vuelta ayudándose con un plato (se vuelve sobre el plato y luego se empuja de nuevo a la sartén) y lo mismo, esperar hasta que esté dorada y sacar.
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